El sector pide mayor concienciación sobre la ingesta de lácteos en niños y adolescentes
Con motivo de la celebración del Día Mundial de los Lácteos en la Escuela, la Interprofesional Láctea se suma a esta iniciativa promovida por la FAO y recuerda que el consumo de leche y lácteos es necesario para lograr una dieta equilibrada y saludable. La ingesta de, al menos, tres lácteos al día en ambas etapas sería suficiente para cubrir las necesidades de calcio, un elemento vital para el crecimiento y desarrollo normal de huesos y dientes. Los lácteos también aportan un alto contenido de potasio, zinc y fósforo, así como yodo, característico de los quesos.
Este miércoles, 26 de junio, más de 25 países celebran el Día Mundial de los Lácteos en la Escuela, una iniciativa promovida por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, en sus siglas en inglés), con el objetivo de recordar los beneficios asociados al consumo de leche en edad escolar. En España, Inlac, la Organización Interprofesional del Sector Lácteo, se suma a este día y recuerda la importancia de consumir un mínimo de tres raciones diarias de lácteos en niños y adolescentes con el fin de alcanzar las recomendaciones nutricionales que aconsejan los expertos y prevenir, entre otros, problemas óseos en la edad adulta. Inlac alerta del descenso en el consumo de leche y lácteos (-6,35% de leche líquida en el periodo 2012-2017 y -0,72% de derivados lácteos), y considera la escuela un espacio que puede ayudar a revertir el descenso en el consumo.
Un gran porcentaje de escolares españoles realizan varias comidas al día dentro del colegio: desayuno, media mañana, comida e incluso merienda. Los lácteos tienen presencia en la alimentación escolar. Sin embargo, su frecuencia es irregular y en algunos lugares escasa o inexistente. Por ello, Inlac trabaja para que las autoridades incrementen la presencia de lácteos en las escuelas, contribuyendo a facilitar la ingesta mínima recomendada de, al menos, 3 lácteos al día.
En concreto, desde hace dos años Inlac está llevando a cabo la campaña europea ‘Di que sí al menos a 3 lácteos al día’, proyecto cofinanciado por la Unión Europea para dar una respuesta conjunta a la necesidad de fomentar la presencia de la leche y los productos lácteos en el día a día de la sociedad, especialmente en los niños, además de fomentar la actividad física como estrategia frente a los problemas de salud relacionados con la alimentación, el sobrepeso y la obesidad.
Los expertos recuerdan que durante la infancia tiene lugar el crecimiento y desarrollo del individuo y los lácteos ayudan a proporcionar nutrientes necesarios en este período. Pasados los primeros años, se recomiendan dos o tres raciones diarias de lácteos, que aumentarán a 3-4 durante la adolescencia. Precisamente, “en esta etapa es donde se alcanza el pico de masa ósea; es decir, la cantidad de calcio que hay en nuestros huesos, por lo que si cumplimos las recomendaciones llegaremos a la etapa adulta y a la vejez con una cantidad de calcio suficiente que no desencadenará en problemas óseos”, explica Manuela Juárez, experta en tecnología de los alimentos, del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Ingestas recomendadas por edades
La Asociación Española de Pediatría (AEP) recomienda la ingesta de 1.000 mg de calcio al día entre los 4 y los 8 años de edad, y entre los 9 y los 14 años, 1.300 mg. Asimismo, es aconsejable diversificar el consumo y no centrarse únicamente en la leche, añadiendo a la dieta otros productos lácteos, como el yogur o el queso.
En la misma línea se pronuncia Rosaura Leis, coordinadora de la Unidad de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica del Hospital Clínico Universitario de Santiago, quien explica las raciones de lácteos recomendadas: “Un vaso de leche equivale a 200-225 ml; dos yogures, a unos 150 ml, y una ración de queso curado podría oscilar entre los 30 y los 60 gr”.
Beneficios que aportan los lácteos
Los lácteos son una fuente de minerales. No solo contienen calcio, que es necesario para el crecimiento y desarrollo normal de huesos y dientes, sino que aportan potasio, zinc y fósforo, así como yodo, característica de los quesos.
Por otra parte, conviene recordar que los productos lácteos contienen proteínas necesarias para la formación y reparación de las estructuras corporales, contribuyendo a aumentar y conservar la masa muscular con todos los aminoácidos esenciales.
El hidrato de carbono predominante en los lácteos es la lactosa, que proporciona hasta el 25% de la energía total que necesita, sin olvidar que la leche es fuente de riboflavina, vitamina B12, y también aporta a la dieta otras vitaminas como la vitamina A, C y niacina. Y si están enriquecidos con vitamina D contribuyen al mantenimiento de los huesos y los dientes en condiciones normales, algo especialmente relevante para niños y jóvenes.