Mitigación de gases de efecto invernadero en ganado lechero mediante genética

Un equipo de investigadores de España, del que forman parte José Antonio Jiménez Montero y Noureddine Charfeddine del departamento técnico de Conafe, apunta a mitigar la producción de metano del ganado lechero a través de la selección genética. Según un artículo publicado en el Journal of Dairy Science, los científicos apuntan a la reducción del metano entérico mediante los objetivos de cría del ganado lechero con una selección de animales que usen piensos de manera más eficiente y, por lo tanto, produzcan menos metano. Debido a que la ganadería contribuye con el 13% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero (GEI), la cría selectiva puede reducir esas emisiones al tiempo que aumenta la producción de leche.

El metano de la fermentación entérica se considera el principal contribuyente a los GHG Protocol (Protocolos de Gases de Efecto Invernadero) procedentes de los rumiantes. Estas emisiones contribuyen al calentamiento global y representan una pérdida de energía alimentaria en los rumiantes. “La selección actual está aumentando la producción total de metano en la población de vacas lecheras, pero está reduciendo la intensidad de metano (por kilogramo de leche) debido a los niveles productivos más altos de cada vaca. Una reducción de metano en los objetivos de reproducción también debe incluirse en los índices de selección”, señala uno de los autores principales del estudio, el doctor Óscar González-Recio, del Departamento de Mejora Genética Animal del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria.

La evaluación de los rasgos genéticos y la respuesta económica de esos rasgos en el índice de selección se consideraron en este estudio. Si bien, la producción de metano es necesaria para mantener la homeostasis del rumen, se espera que las emisiones totales de metano disminuyan de un 4% a un 6% en diez años debido al aumento de la producción de leche por vaca. Si la producción anual de metano por vaca se incluye en los objetivos de reproducción y se asignan pesos ad hoc a la producción de metano, la emisión de GEI (Gases de Efecto Invernadero) del ganado podría reducirse en un 20% en 10 años. Si no se toman medidas, se espera que aumente el potencial genético para la producción de metano. Si bien el límite biológico de la producción de metano sigue siendo desconocido, este estudio muestra el potencial de incluir rasgos ambientales en los índices de selección mientras se retienen las poblaciones de vacas que son rentables para los productores.

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