Reclaman un estudio riguroso en Cataluña antes de vacunar contra la lengua azul
Unió de Pagesos exige al Ministerio de Agricultura un análisis de riesgo riguroso de la situación de los sectores ovino y vacuno ante el serotipo 8 de la enfermedad de la lengua azul, antes de obligar a los ganaderos de 27 comarcas catalanas a vacunar a todos los animales contra esta enfermedad antes del próximo 30 de abril, tal y como recoge el proyecto de Orden, que tiene como objetivo prevenir la entrada del virus causante de la afectación en España, ya que está presente en la mayor parte del territorio francés.
El sindicato pide que, en lugar de aplicar la medida drástica de vacunar a todos los animales teniendo en cuenta que en Cataluña no hay presencia del virus, se aplique la normativa de la Unión Europea según la cual hay que realizar un análisis de riesgo, ya que permitiría llevar a cabo un plan de prevención con todas las herramientas que prevé la normativa. Actualmente, en España ya funcionan medidas de vigilancia para poder detectar la lengua azul, entre otros a través de animales centinelas (a los que se somete a analíticas periódicas).
Unió de Pagesos recuerda que debido a la vacunación masiva contra la lengua azul que se llevó a cabo en el Estado en 2008 murieron muchos animales, en algunas explotaciones rebaños enteros, y supuso una importante pérdida económica consecuencia, entre otras cuestiones, de las condiciones de la propia vacuna y de la manera de suministrarla. Además, en el caso actual, la sequía de este año es peor que la de aquel año. Hay que tener en cuenta que los animales deben estar en buenas condiciones físicas para ser vacunados, y en épocas de sequía no lo están tanto. Para Unió de Pagesos, que ya ha hecho llegar sus enmiendas al proyecto de orden del Ministerio, no tiene sentido vacunar en las 27 comarcas catalanas más cercanas a la frontera francesa, y que están libres de la enfermedad, mientras no se está aplicando una medida similar de vacunación masiva en la zona del sur de Francia para crear una franja de protección de entrada del virus en España. Así, el sindicato considera que hay que exigir al Gobierno francés una vacunación masiva en una zona que actúe como franja de protección para que el virus no se extienda en Cataluña y el resto del Estado.
El sindicato también considera que, en el supuesto de que se hubiera de terminar vacunando, los ganaderos de las comarcas afectadas por la vacunación obligatoria en Cataluña no deberían hacerse cargo del importe de la aplicación de las vacunas ya que no son responsables de la situación generada.
Las 27 comarcas catalanas incluidas en el proyecto de orden del Ministerio son Barcelona, Anoia, Bages, Berguedà, Maresme, Osona, Vallès Occidental, Vallès Oriental, Conca de Barberà, Urgell, Pla d’Urgell, Noguera, Alt Urgell, Alta Ribagorça, Cerdanya, Pallars Jussà, Pallars Sobirà, Segarra, Solsonès, Val d’Aran, Gironès, la Selva, el Pla de l’Estany, Alt Empordà, Baix Empordà, Garrotxa y Ripollès.
Para Unió de Pagesos, la elección de esta franja de 27 comarcas y la decisión de vacunar todos los ovinos y bovinos no responde a un criterio riguroso; habría que seleccionar tanto el territorio como los animales objeto de vacunación con más exactitud, según los resultados del análisis de riesgo, para que afecte al menor número posible de explotaciones.
El sindicato pide que el Comité Nacional del Sistema de Alerta Sanitaria Veterinaria convoque el Comité Consultivo de Sanidad Animal para tener en cuenta las propuestas de las organizaciones y asociaciones agrarias, como prevé la normativa estatal.