Alrededor del 40% de la ternera de Cataluña ya es de sacrificio ‘halal’
En torno a la mitad de las piezas de origen bovino y ovino que se ponen a la venta en Catalunya han cumplido con este requisito religioso, pese a que la inmensa mayoría de consumidores no lo demandan. Y ni siquiera lo llegan a saber, dado que la normativa no obliga al comercio a informar al respecto, según publica El Periódico.
En el caso del ganado bovino, la cifra es del 40,4% entre sus asociados. Datos llamativos que parecen estar muy lejos de estabilizarse. Por motivos de bienestar animal, la normativa europea obliga a aturdir al ganado antes del sacrificio en los mataderos, lo que lógicamente supone unos requisitos técnicos y de tiempo, pero permite excepciones por motivos religiosos. En el ritual ‘halal’, el animal debe estar consciente antes de ser desangrado. Desde un punto de vista de la calidad sanitaria, no hay cambios.
¿A qué se debe la creciente oferta de carne ‘halal’ en un mercado con una demanda residual? Un empresario del sector apunta al “empeoramiento del aspecto de la carne” si se recurre al aturdimiento del animal antes de matarlo, por las hemorragias que sufre si no se sacrifica a los pocos segundos, un extremo que reduce su sufrimiento pero que es inadmisible para musulmanes y judíos.
El secretario general de Fecic, Josep Collado, explica el auge a partir de otros dos aspectos: la subida de carne exportada a mercados como el magrebí y el árabe y por ser una demanda no lineal de estos productos. “Hay partes del animal con menos valor gastronómico para los autóctonos, pero de gran significado para los originarios de otra cultura, como vísceras y patas delanteras; aunque solo una parte del animal va a tener ese destinatario, toda su carne se habrá sometido al rito”, detalla.