China ha impuesto mayores controles de frontera a la importación de carnes y productos cárnicos. De esta forma, según Rabobank, se ha logrado reducir el comercio de carne de forma no oficial durante finales del 2018 y de esta forma el comercio de carne se tiene que hacer de forma regular por lo que ha crecido un 50% la importación de carne de vacuno y en un 1,5% la producción nacional, según publica Eurocarne.
Rabobank estima que esta tendencia se va a dar durante al menos el primer semestre de 2019 lo que llevará a que se convierta en un mercado interesante para más y más importadores. Al tiempo, las compras desde países como Hong Kong o Vietnam se han reducido.

Pese a esto último, Hong Kong importó en 2018 un 12% más de carne de vacuno y un 8% más de subproductos. Esto hace que se vaya acumulando sin tener una salida clara hacia el resto de China y que los almacenes frigoríficos ya estén copados. También Vietnam está viviendo estos problemas por la falta de compra de carne de vacuno desde China que lleva, a su vez, a que Vietnam no compre carne de búfalo desde India (en el último trimestre de 2018 se ha reducido en un 60%) para luego reexportarla a China.