#sábadocanalla: Fomentemos nuestros quesos de vaca
Es una escena terriblemente real que los que trabajamos con el ámbito rural, pero bien pegados a la ciudad, hemos vivido en más de una ocasión. Se trata del completo desconocimiento que tienen algunos urbanitas sobre algunas de las cuestiones más básicas de la producción agrícola o ganadera. El último capítulo que hemos vivido los canallas de VACUNO DE ÉLITE nos ha dejado absolutamente boquiabiertos. “Ah, pero… ¿existen los quesos de vaca? Si la leche de vaca es para beber, ¿no?” Nos gustaría que fuera una broma que os estamos gastando, pero no es así, hay gente que lo piensa. Que no se hacen quesos con la leche de vaca de nuestras explotaciones.
Quizás el error hay que buscarlo bien cerca, en la propia idiosincrasia de un sector que, sobre todo en algunas regiones, tiene cierto complejo de inferioridad respecto a las características de la leche de vaca para fabricar queso. Hay zonas, como ocurre en Galicia con varias denominaciones de origen y marcas de reconocido prestigio, que ya tienen solucionado ese aspecto, pero en otras comunidades autónomas falta que se fomenten y se promocionen los aspectos de los quesos de vaca, una cremosidad que no se puede alcanzar con otra leche y una personalidad propia que no tiene nada que envidiar.
Mientras tanto, asistimos al esperpéntico y paradójico espectáculo de que todos los quesos foráneos que triunfan en los supermercados españoles están elaborados con leche de vaca, mientras los nuestros tienen más dificultades para abrirse paso en los hogares. Unos hogares que tienen de forma habitual un cheddar en su frigorífico. Casas en las que nunca ha entrado un tetilla…