El anillo de exhibiciones del Recinto Ferial de la Diputación de Salamanca acogió, como cada año, la Subasta Nacional de Ganado Vacuno, que contaba, de inicio, con 162 cabezas de siete razas diferentes. Fieles a la costumbre, los toros de Limusín volvieron a ser los más atractivos para los compradores, que llegaron a pagar hasta 15.000 por ‘Nini’, un novillo de la ganadería de Daniel Heras Monduate que, finalmente y tras una dura puja, fue adquirido por el ganadero gaditano Agustín Cuaresma.

En el ambiente de la grada, que aplaudió la dura pugna que mantuvieron hasta tres profesionales por hacerse con el animal, sobrevolaba lo sucedido en el año 2016 con ‘Jockey’, el ejemplar que, hasta la fecha, sigue ostentando el récord al mayor precio de venta en una subasta al llegar hasta los 17.300 euros.

A pesar de todo, la de este lunes fue una subasta moderada en cuanto a ventas. Mientras los 17 ejemplares de Limusín sumaron unas transacciones por un importe de 84.000 euros y hasta seis animales adjudicados por su precio de salida, la subasta del Charolés fue el claro reflejo de esa tendencia que vive el sector este año, pues hasta 20 pujas quedaron desiertas, entre ellas las de los dos ejemplares con los precios de salida más altos (6.500 y 7.000 euros). En total se adjudicaron 29 ejemplares por valor de 94.600 euros.

Sin embargo, la nota negativa de la subasta fue protagonizada este año por la raza Blonda de Aquitania que de sus 11 ejemplares sólo encontraron comprador seis por un valor de 16.500 euros.

Esa menor alegría en las ventas se dejó notar menos en el caso de las razas autóctonas, que pudieron mantener un volumen comercial similar al de ediciones anteriores. Así, la Asturiana de los Valles rompió la tendencia con la venta de 12 ejemplares nada menos que por 31.300 euros. Por su parte, la raza Pirenaica adjudicó sus quince ejemplares presentados por 29.210 euros. La raza Avileña Negra Ibérica también deparó una subasta normal con 38 de los 42 ejemplares vendidos por un importe de 39.710 euros. Finalmente, la raza Retinta que solo presentó seis ejemplares logró vender cinco y por un precio de 4.900 euros.