El ganado andaluz se queda sin alimentos por la sequía y la subida de los piensos
La peor sequía en 25 años está causando estragos en el campo andaluz. Además de a los cultivos, la falta de lluvias está perjudicando gravemente a la ganadería, que tiene un handicap añadido: el incremento de costes de alimentación de los animales.
La situación es tan insostenible que desde COAG Andalucía se lanza un SOS: “El ganado no tiene qué comer y los piensos están por las nubes”. Así lo confirma Antonio Rodríguez, responsable de Sectores Ganaderos de COAG Andalucía, quien destaca que los costes de producción se han disparado para los agricultores y ganaderos a niveles nunca vistos. Y, para la ruina de los ganaderos, los piensos para el ganado se han encarecido un 30% en el último año.
Además de la subida desproporcionada que se está produciendo en insumos básicos como el pienso para la alimentación del ganado, hay que destacar igualmente el incremento del recibo de la luz (+270%), y esto se une, en una fatídica tormenta perfecta, con la situación de sequía que está sufriendo Andalucía. “El campo está seco –dice Antonio Rodríguez-, no hay vegetación para que se alimente el ganado y la situación nos está ahogando, porque los costes son inasumibles”.
La escasez de precipitaciones, de carácter generalizado en la región, está generando serios problemas para que el ganado disponga de pastos para poder alimentarse. Según un análisis de la Consejería de Agricultura, la intensidad de la sequía en el conjunto de la región se sitúa en los niveles de sequía severa, destacando especialmente la situación de 40 comarcas (un 70% del total).