Terminar con la situación “de dependencia” en la que se encuentra Extremadura pasa por evitar que el valor añadido de las materias primas, la energía, la mano de obra y el talento de la comunidad se vayan fuera, según Ecologistas en Acción. En el sector cárnico, la solución al problema pasa por su transformación en Extremadura.

Señalan que el modelo que se debería implantar para lograr una economía sostenible y de respeto al medio ambiente “entra en conflicto con el modelo de política neoliberal que la Junta está aplicando en todos los sectores de la sociedad” y hacen notar que “en los años de gobierno del PP, mediante un Decreto cerraron alrededor de 400 Mataderos Municipales y Regionales a nivel estatal, unos cuarenta en Extremadura, por lo cual han concentrado la producción en pocas manos, algo que después tampoco el PSOE ha querido revertir”, refleja Eurocarne.

Según la organización ecologista, una de las carencias más importantes en el sector de la ganadería, especialmente de las pequeñas granjas, es la falta de mataderos ecológicos certificados que estén cerca del lugar de producción. Esto supone para los ganaderos un encarecimiento del producto (por el alquiler de medios de transporte, combustible, tarifas de matadero…).